Ya se sabía que la cumbre de Copenhague, no caminaba hacia ninguna parte, por un lado, la desorganización del mundo pobre, y por otro lado, la insolencia del mundo rico.
Pero, no me hubiera esperado, las palabras del secretario general de la ONU, pidiendo a los pobres que cedamos ante las brutales pretensiones de los ricos, si bien es cierto, que nosotros también contribuimos a la polución ambiental, también es cierto que lo hacemos en mucha menor proporción que el mundo rico, ya se nos acusó de deforestar nuestros bosque, si, ¿pero en beneficio de quien? De ellos o de nosotros, de ese modo nos dirán, que somos extractores, de metales, de gas, etc. pero ¿Para quién?, si nosotros, sudamericanos y africanos no sabemos transformar materia prima en bienes finales; el derroche energético no es nuestro tampoco, sino de ellos.
Es ya evidente, que los gobiernos y Estados del mundo rico, están decididos a no responder por sus desafueros e irresponsabilidad frente a la naturaleza. Cualquiera que lea el informe Lugano de la autora norteamericana Susan George, verá que se propone eliminar a dos terceras partes de la humanidad, manipulando a la naturaleza como instrumento de genocidio, dirigido especialmente contra los pueblos desorganizados y pobres, y no me refiero a la pobreza material, sino a la intelectual, sobretodo.
¿Cuál es el calculo de los ricos?, ¿irse a otro planeta?, no han descubierto ninguno que tenga las características de nuestros planeta azul; si leen la obra: “galaxias, súper galaxias y meta galaxias, escrita por 40 astrónomos de diversas nacionalidades, verán que la tierra, es un caso rarísimo en el inmenso universo. ¿Quién soy yo para contradecir a esos científicos?.
¿Acelerar el paso hacia el Armagedón?, que ellos mismos han creado, es decir, debemos entender que a los ricos ya nada les importa, ya están hastiados de sus inútiles vidas, de su mediocridad, de su falta de imaginación y nos arrastraran a todos en su estupidez.
¿añadir mas adrenalina al emocionante final de todas las formas de vida?
Frente a la brutalidad ramplona de los ricos, se levanta altiva la voz de los pueblos milenarios de América: Hugo Chávez y Evo Morales, quienes señalan sin tapujos a los culpables del drama actual y además proponen soluciones tajantes: buscar otras formas de producción, eliminar al automóvil, desarrollar formas distintas de obtener energía, organizar a los pueblos para defender a la Pacha mama.
“si el clima fuera un Banco, ya lo habrían ayudado”, o “cambien al sistema, no al clima” fueron dos llamativos avisos, que se vieron en las calles de la capital danesa, y si, el sistema capitalista ha sido, es, altamente depredador e irracionalmente consumista, el mismo sistema ha provocado la presencia de varias crisis al mismo tiempo, creo que hemos llegado al fin de la historia capitalista, pues sufre contradicciones insolubles, y habrá que adelantarse a la violencia que proponen los ricos, o ellos, o nosotros, es la consigna actual.
O eliminamos a unos cuantos imbéciles, o ellos nos eliminan a todos.
Leído en Radio Tropicana el 18/12/09 por:
Nelson Dávila Acosta
Pero, no me hubiera esperado, las palabras del secretario general de la ONU, pidiendo a los pobres que cedamos ante las brutales pretensiones de los ricos, si bien es cierto, que nosotros también contribuimos a la polución ambiental, también es cierto que lo hacemos en mucha menor proporción que el mundo rico, ya se nos acusó de deforestar nuestros bosque, si, ¿pero en beneficio de quien? De ellos o de nosotros, de ese modo nos dirán, que somos extractores, de metales, de gas, etc. pero ¿Para quién?, si nosotros, sudamericanos y africanos no sabemos transformar materia prima en bienes finales; el derroche energético no es nuestro tampoco, sino de ellos.
Es ya evidente, que los gobiernos y Estados del mundo rico, están decididos a no responder por sus desafueros e irresponsabilidad frente a la naturaleza. Cualquiera que lea el informe Lugano de la autora norteamericana Susan George, verá que se propone eliminar a dos terceras partes de la humanidad, manipulando a la naturaleza como instrumento de genocidio, dirigido especialmente contra los pueblos desorganizados y pobres, y no me refiero a la pobreza material, sino a la intelectual, sobretodo.
¿Cuál es el calculo de los ricos?, ¿irse a otro planeta?, no han descubierto ninguno que tenga las características de nuestros planeta azul; si leen la obra: “galaxias, súper galaxias y meta galaxias, escrita por 40 astrónomos de diversas nacionalidades, verán que la tierra, es un caso rarísimo en el inmenso universo. ¿Quién soy yo para contradecir a esos científicos?.
¿Acelerar el paso hacia el Armagedón?, que ellos mismos han creado, es decir, debemos entender que a los ricos ya nada les importa, ya están hastiados de sus inútiles vidas, de su mediocridad, de su falta de imaginación y nos arrastraran a todos en su estupidez.
¿añadir mas adrenalina al emocionante final de todas las formas de vida?
Frente a la brutalidad ramplona de los ricos, se levanta altiva la voz de los pueblos milenarios de América: Hugo Chávez y Evo Morales, quienes señalan sin tapujos a los culpables del drama actual y además proponen soluciones tajantes: buscar otras formas de producción, eliminar al automóvil, desarrollar formas distintas de obtener energía, organizar a los pueblos para defender a la Pacha mama.
“si el clima fuera un Banco, ya lo habrían ayudado”, o “cambien al sistema, no al clima” fueron dos llamativos avisos, que se vieron en las calles de la capital danesa, y si, el sistema capitalista ha sido, es, altamente depredador e irracionalmente consumista, el mismo sistema ha provocado la presencia de varias crisis al mismo tiempo, creo que hemos llegado al fin de la historia capitalista, pues sufre contradicciones insolubles, y habrá que adelantarse a la violencia que proponen los ricos, o ellos, o nosotros, es la consigna actual.
O eliminamos a unos cuantos imbéciles, o ellos nos eliminan a todos.
Leído en Radio Tropicana el 18/12/09 por:
Nelson Dávila Acosta