Pocas veces en la historia de estos últimos dos mil años, se ha visto algo tan escandaloso, como lo ocurrido en Londres, Inglaterra, esta semana que acaba de terminar, claro que escándalos hubo siempre y de diversa magnitud, recordemos al Papa César Borgia y sus bacanales, recordemos que los conventos, fueron durante mucho tiempo, la mayor cantera de homosexuales, al decir del semiólogo italiano Humberto Eco, en una obra poca conocida por el gran público ecuatoriano: “El Nombre de la Rosa”; las acciones criminales de los españoles en nuestra América, durante la conquista, en que convirtieron a los indios norteamericanos en abono y a los sudamericanos en zombis, fueron acompañados por diversas órdenes religiosas que participaron activamente en esos crímenes, tal como denuncia un famoso sacerdote, Fray Bartolomé de Las Casas, en su carta denuncia al rey de España, lean por favor: “La Destrucción de las Indias”.
El historiador ecuatoriano Osvaldo Albornoz, en su obra “Historia Clerical del Ecuador”, denuncia los métodos abusivos de los curas españoles, en nuestras tierras, para hacerse de ellas, gratuitamente. En la configuración de la conciencia social americana, ha participado activamente la Iglesia, desgraciadamente, pues ha logrado ocultar sus crímenes, tras la fachada de la educación religiosa.
Tampoco olvidemos al papa Pío 11, quien firmó un pacto con Hitler, cerrando la Iglesia los ojos ante el genocidio judío. Lo ocurrido, en Londres, no es sino, el corolario, la respuesta, de uno de los pueblos más cultos del mundo, que ha llegado a pedir boleta de captura para el Papa, apenas pise suelo ingles, por eso es que aquel, curándose en salud, llega a ese país, en calidad de Jefe de Estado, por eso es que llega con guardaespaldas, y el gobierno ingles, se ve obligado a gastar varios millones en el cuidado policial del Papa, el pueblo británico ha rechazado que los impuestos que paga, se utilicen en el resguardo de ese hombre, muy poco carismático además, y que para colmo, cuando joven, fue miembro de las juventudes nazis.
Si, el mundo ha cambiado muchísimo, Islandia, pidió la prisión de todos sus banqueros, científicos británicos, piden la prisión del Papa, Bélgica, ha enviado a la cárcel a sus arzobispos, obispos, cardenales, por un sonado escándalo de pedofilia multitudinaria, que incluye la aparición en cadena nacional de una las víctimas, señalando a una autoridad eclesial: “él me violó”. En la católica España, diversas organizaciones sociales, preguntan a Rodríguez Zapatero: ¿paga impuestos la Iglesia?, ¿porque el Estado español la subvenciona?.
En Alemania, el año pasado, la curia de ese país, se vio obligada a vender siete mil edificios: conventos, seminarios, templos, etc. porque se quedó sin feligreses, por tanto ya no podía sostener tanto edificio; en Berlín, su municipio propuso la enseñanza de religión en escuelas y colegios, la respuesta de los padres de familia, fue multitudinaria, millones de berlineses, salieron a las calles a defender el laicismo en la enseñanza, la misma prensa germana señaló: “Dios perdió en Berlín”.
Sólo acá, en nuestro mundo subdesarrollado, en donde la ignorancia y el analfabetismo y el poco acceso a Internet, así como una pésima educación en general, la religión se fortalece, incluso la revista “Vistazo” ha señalado que Ecuador es un país, donde cualquier religión, logra en poco tiempo, convertir en millonarios a unos cuantos pastores avispados.
Tengamos presente que la religión es un arma más, en el amplio arsenal del imperio.
Pero recordemos: el presente del mundo desarrollado, es el futuro, del mundo subdesarrollado.
Los artículos que posibilitaron este editorial, los encontrará en PEM.
El historiador ecuatoriano Osvaldo Albornoz, en su obra “Historia Clerical del Ecuador”, denuncia los métodos abusivos de los curas españoles, en nuestras tierras, para hacerse de ellas, gratuitamente. En la configuración de la conciencia social americana, ha participado activamente la Iglesia, desgraciadamente, pues ha logrado ocultar sus crímenes, tras la fachada de la educación religiosa.
Tampoco olvidemos al papa Pío 11, quien firmó un pacto con Hitler, cerrando la Iglesia los ojos ante el genocidio judío. Lo ocurrido, en Londres, no es sino, el corolario, la respuesta, de uno de los pueblos más cultos del mundo, que ha llegado a pedir boleta de captura para el Papa, apenas pise suelo ingles, por eso es que aquel, curándose en salud, llega a ese país, en calidad de Jefe de Estado, por eso es que llega con guardaespaldas, y el gobierno ingles, se ve obligado a gastar varios millones en el cuidado policial del Papa, el pueblo británico ha rechazado que los impuestos que paga, se utilicen en el resguardo de ese hombre, muy poco carismático además, y que para colmo, cuando joven, fue miembro de las juventudes nazis.
Si, el mundo ha cambiado muchísimo, Islandia, pidió la prisión de todos sus banqueros, científicos británicos, piden la prisión del Papa, Bélgica, ha enviado a la cárcel a sus arzobispos, obispos, cardenales, por un sonado escándalo de pedofilia multitudinaria, que incluye la aparición en cadena nacional de una las víctimas, señalando a una autoridad eclesial: “él me violó”. En la católica España, diversas organizaciones sociales, preguntan a Rodríguez Zapatero: ¿paga impuestos la Iglesia?, ¿porque el Estado español la subvenciona?.
En Alemania, el año pasado, la curia de ese país, se vio obligada a vender siete mil edificios: conventos, seminarios, templos, etc. porque se quedó sin feligreses, por tanto ya no podía sostener tanto edificio; en Berlín, su municipio propuso la enseñanza de religión en escuelas y colegios, la respuesta de los padres de familia, fue multitudinaria, millones de berlineses, salieron a las calles a defender el laicismo en la enseñanza, la misma prensa germana señaló: “Dios perdió en Berlín”.
Sólo acá, en nuestro mundo subdesarrollado, en donde la ignorancia y el analfabetismo y el poco acceso a Internet, así como una pésima educación en general, la religión se fortalece, incluso la revista “Vistazo” ha señalado que Ecuador es un país, donde cualquier religión, logra en poco tiempo, convertir en millonarios a unos cuantos pastores avispados.
Tengamos presente que la religión es un arma más, en el amplio arsenal del imperio.
Pero recordemos: el presente del mundo desarrollado, es el futuro, del mundo subdesarrollado.
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