El primer grito de independencia americano fue el haitiano en Octubre de 1803, fue la revuelta de un pueblo esclavo y negro y que tomó el poder por sí y para si, después de asesinar a todos los blancos franceses (que envidia); después que Jacobo Dessalines asumiera el poder, se inicia una etapa liberadora, en cuanto reparto de la tierra, derogación de la esclavitud, y el comienzo de la agricultura y de la ganadería como fuente de desarrollo de ese atrevido pueblo.
Las noticias acerca de esa lucha libertaria, no llegaron al resto del continente americano, pues eran un mal ejemplo para nuestros pueblos oprimidos, nos enteramos muchos años después…. En que mientras tanto, Francia y España, hicieron lo posible para dominar a ese rebelde pueblo. El precio del reconocimiento por parte francesa de la libertad fue una extenuante deuda externa, que demoró mas de un siglo en ser pagada; Simón Bolívar advirtió acerca del enorme poder que para inicios del siglo 19, acumulaba ya EE. UU. Y las graves consecuencias que ello acarrearía a indoamerica; ninguna potencia ayudó a Haití a establecer una economía coherente, sólida, con perspectivas, mas bien fue USA, el país que invadió territorio haitiano en 1915, hasta 1935, periodo en el cual los diversos sectores económicos logran desarrollar exportaciones hacia el mercado norteamericano, pasando a depender totalmente de EE.UU., después de la salida de los marines yanquis, advendrá una larga época de dictaduras, de la imposición de “papá doc” Duvalier, cruel tirano, organizador de los “TONTÖN MACOUTES”, una especie de guardia pretoriana de aquel dictador y de su familia, todo el empleo en la isla depende de maquilas norteamericanas, cuando estas se van hacia 1959, el empleo desciende a 0, las escasas tierras productivas, pertenecen a empresas americanas, el producto de la pesca, igual, llega un largo periodo en que las familias haitianas sobreviven con un dólar diario, en Puerto Príncipe, no hay alcantarillado, agua potable, ni servicio publico alguno, esta ciudad es mas miserable que Calcuta, sin ninguna Madre Teresa cerca.
Después del reciente terremoto, Cuba colaboró con la presencia inmediata de 1000 médicos cubanos y algunas decenas de médicos haitianos, formados en escuelas cubanas, amen de medicinas y equipos varios; Francia y México acudieron con ambulancias, camillas, sillas de ruedas, medicamentos, etc. Hugo Chávez, y su gobierno obsequian a Haití todo el combustible que sea necesario, mientras dure una reconstrucción básica del país. EE. UU. Llegaron con 35.000 soldados, armados hasta los dientes, equipamiento bélico, helicópteros artillados y un hospital flotante, que hasta hoy jueves 21, solo ha atendido a 10 sobrevivientes del desastre, según la BBC mundo de hoy, parece que el presidente Obama ha resuelto vernos la cara de pendejos a todos los demás, invadiendo Haití, para convertirlo en la octava base militar o en un portaviones fijo en el Caribe y apuntando todas sus armas contra toda Sudamérica, los ciudadanos norteamericanos deben despertar ya de la hipnosis republicano – demócrata y exigir la revocatoria del poder del presidente negro con alma de blanco colonizador, pues, el daño que piensa infligirnos, puede ser mortal, para ambas partes.
Las noticias acerca de esa lucha libertaria, no llegaron al resto del continente americano, pues eran un mal ejemplo para nuestros pueblos oprimidos, nos enteramos muchos años después…. En que mientras tanto, Francia y España, hicieron lo posible para dominar a ese rebelde pueblo. El precio del reconocimiento por parte francesa de la libertad fue una extenuante deuda externa, que demoró mas de un siglo en ser pagada; Simón Bolívar advirtió acerca del enorme poder que para inicios del siglo 19, acumulaba ya EE. UU. Y las graves consecuencias que ello acarrearía a indoamerica; ninguna potencia ayudó a Haití a establecer una economía coherente, sólida, con perspectivas, mas bien fue USA, el país que invadió territorio haitiano en 1915, hasta 1935, periodo en el cual los diversos sectores económicos logran desarrollar exportaciones hacia el mercado norteamericano, pasando a depender totalmente de EE.UU., después de la salida de los marines yanquis, advendrá una larga época de dictaduras, de la imposición de “papá doc” Duvalier, cruel tirano, organizador de los “TONTÖN MACOUTES”, una especie de guardia pretoriana de aquel dictador y de su familia, todo el empleo en la isla depende de maquilas norteamericanas, cuando estas se van hacia 1959, el empleo desciende a 0, las escasas tierras productivas, pertenecen a empresas americanas, el producto de la pesca, igual, llega un largo periodo en que las familias haitianas sobreviven con un dólar diario, en Puerto Príncipe, no hay alcantarillado, agua potable, ni servicio publico alguno, esta ciudad es mas miserable que Calcuta, sin ninguna Madre Teresa cerca.
Después del reciente terremoto, Cuba colaboró con la presencia inmediata de 1000 médicos cubanos y algunas decenas de médicos haitianos, formados en escuelas cubanas, amen de medicinas y equipos varios; Francia y México acudieron con ambulancias, camillas, sillas de ruedas, medicamentos, etc. Hugo Chávez, y su gobierno obsequian a Haití todo el combustible que sea necesario, mientras dure una reconstrucción básica del país. EE. UU. Llegaron con 35.000 soldados, armados hasta los dientes, equipamiento bélico, helicópteros artillados y un hospital flotante, que hasta hoy jueves 21, solo ha atendido a 10 sobrevivientes del desastre, según la BBC mundo de hoy, parece que el presidente Obama ha resuelto vernos la cara de pendejos a todos los demás, invadiendo Haití, para convertirlo en la octava base militar o en un portaviones fijo en el Caribe y apuntando todas sus armas contra toda Sudamérica, los ciudadanos norteamericanos deben despertar ya de la hipnosis republicano – demócrata y exigir la revocatoria del poder del presidente negro con alma de blanco colonizador, pues, el daño que piensa infligirnos, puede ser mortal, para ambas partes.
Leído en Radio Tropicana el viernes 29 de Enero, por Nelson Dávila